Es muy conocido que numerosos estudios han hallado evidencia de los beneficios del ejercicio físico para nuestra salud, por ejemplo, aumenta la capacidad cardiorrespiratoria y disminuye el riesgo de sufrir diversas enfermedades, como las cardiovasculares.
Sin embargo, poco se conoce con relación a la influencia de la actividad física en las emociones y la forma en que incorporamos conocimientos.
La mayoría de las investigaciones actuales examinan los efectos de los ejercicios aerobios sobre la cognición humana, dándole menor importancia a los ejercicios de resistencia o fuerza.
Los ejercicios de resistencia son actividades de alta intensidad y corta duración, que fuerzan el músculo esquelético a contraerse, y pueden incluir el levantamiento de pesas, la gimnasia y la calistenia, por ejemplo.
Un análisis exhaustivo realizado por especialistas de la Universidad de Alabama (Birmingham) intenta evaluar los posibles efectos de este tipo de entrenamiento en nuestro desarrollo cognitivo. Los resultados de esta investigación se publicaron en la revista Psychological Research.
En la investigación se realizó un meta-análisis con artículos publicados antes de octubre de 2018, en torno al tema de los ejercicios de resistencia y la salud cognitiva. Los autores siguieron las recomendaciones para revisiones sistemáticas y meta-análisis de la Cochrane Review Guidelines.
De las 547 investigaciones identificadas inicialmente, solo 24 cumplieron con los requerimientos planteados por Landrigan y sus colaboradores: concepto adecuado, estudio de más de 4 semanas que incluye un grupo de control, participantes mayores de 18 años y una metodología que establece la medición directa del efecto de los ejercicios en las habilidades cognitivas de los sujetos de estudio.
Para sintetizar los datos se establecieron 4 análisis primarios: mediciones cognitivo – conductuales, mediciones del deterioro cognitivo, mediciones de las funciones ejecutivas y mediciones de la memoria de trabajo.
Los resultados parecen indicar un efecto positivo de los ejercicios de resistencia en todos los puntos analizados, exceptuando la memoria de trabajo. Puede deberse a que este tipo de entrenamiento requiere planificación y atención al detalle (posición del cuerpo y de las pesas, por ejemplo).
Según los autores, mientras las funciones ejecutivas y la cognición en general están involucradas en el proceso, todo parece indicar que la memoria no juega un rol importante en los ejercicios de resistencia.
Sin embargo, como se indica en la publicación, el tipo y número de mediciones cognitivas es extremadamente variable, lo cual pudo introducir errores en el análisis durante la estandarización.
Estudios futuros
El estudio realizado por investigadores de psicología y neurociencias de la Universidad de Alabama corrobora el impacto positivo de los ejercicios de resistencia en el mantenimiento de la salud mental en los seres humanos.
Sin embargo, cuál es el mecanismo a través del cual se produce esta influencia y qué otras habilidades cognitivas impacta continúa siendo una incógnita.
Esperemos que, en el futuro, investigaciones a largo plazo permitan no solamente aclarar estas preguntas, sino también promover la utilización segura de este tipo de entrenamiento en enfermedades en las que se ve comprometido el funcionamiento cognitivo.
Thais Guillen Otero
Fuente:https://infotiti.com
