es

Archivos para el recuerdo

 

Recordar el día en que compró su primer coche, lo bien que lo pasó junto a su familia en la Nochevieja de hace diez años o aquel viaje que realizó con su pareja a Londres. Algo que para la mayoría supone un mínimo esfuerzo de memoria, para otros es prácticamente imposible, además de doloroso. Pocas enfermedades afectan tanto a una persona y a quienes la rodean como el alzhéimer. Por eso es tan importante, insisten los expertos, trabajar con el enfermo por mantener, todo el tiempo que sea posible, su memoria. Muchos de los documentos que guardamos en casa, en álbumes, cajas de zapatos o cajones que apenas abrimos, pueden ser la llave a un pasado que se torna cada vez más borroso. Desde ayer, y gracias al doctor en Historia e investigador de la Universidad de Oviedo Miguel Calleja, varios familiares de enfermos de alzhéimer tienen las claves necesarias para organizar todas esas fotos, cartas, títulos académicos, escrituras y demás papeles, objetos personales y documentos audiovisuales de forma simple y efectiva.

«Los documentos que guardamos en casa pueden ayudar a los enfermos de alzhéimer a conservar durante más tiempo su memoria, sobre todo si los ordenamos de forma que sean más fáciles de interpretar y entender. Son el reflejo de toda una vida», aseveró el historiador encargado de impartir el taller de ordenación de archivos familiares organizado por la Asociación Democrática Asturiana de Familias con Alzhéimer (ADAFA). Se trata, indicó, de una iniciativa pionera en Asturias que tomó prestada de sus colegas de Guadalajara, quienes ya imparten esta formación a familiares, cuidadores y terapeutas desde hace unos meses.

Además de explicar a los asistentes los pasos a llevar a cabo para poder disponer de un archivo bien organizado, Calleja compartió con ellos varios trucos que son utilizados de forma habitual por los archiveros profesionales. Aconsejó, por ejemplo, anotar la fecha, lo más concreta posible, en el revés de cada fotografía, así como fotocopiarlas e ir apuntando en las copias los nombres y otros datos de las personas que aparecen en ellas. «En el caso de las fotos, lo mejor es dividirlas en retratos, estampas familiares y fotografías de grupos y organizarlas cronológicamente. De esta forma el enfermo no solo recuerda momentos vividos, sino que puede ver cómo fueron evolucionando y cambiando él y sus allegados», explicó.

«Lo que más nos angustia a los familiares de enfermos de alzhéimer es que pierdan sus recuerdos, por eso creemos que aprender a organizar bien los documentos que tenemos por casa es fundamental para intentar que los conserven durante el mayor tiempo posible», aseveró, por su parte, la presidenta de ADAFA, Concha Mena.

 

Font: El comercio.es